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Astronomía y astrología no son lo mismo. La astronomía es una ciencia que estudia el origen, naturaleza y evolución de los objetos del Universo tales como estrellas, planetas, galaxias o nebulosas mientras que la astrología es una pseudociencia que se sustenta sobre creencias y tradiciones y que intenta encontrar una influencia de la posición de los planetas en el devenir de las personas o en eventos.
Es bastante habitual que la gente confunda ambos términos y hay que tener cuidado porque hay pocas cosas que molesten tanto a un astrónomo como que le llamen astrólogo o que le hablen de signos zodiacales.
Si bien los astrólogos estudian la posición y movimiento de los astros su similitud con el trabajo de un astrónomo queda totalmente diferenciada desde hace siglos. En la antigüedad astronomía y astrología caminaban de la mano ya que ambas se fundamentaban en la observación de los objetos celestes. Pero mientras la astrología no ha avanzado desde hace siglos y sigue basándose en datos obsoletos e interpretaciones personales la astronomía ha sido una ciencia en constante cambio y evolución en la que su relación con otras ramas científicas como la química, la física o las matemáticas han dado a cabo una auténtica revolución que nos ha permitido estudiar objetos situados a miles de millones de años luz o incluso asomarnos al origen de nuestro propio Universo. A día de hoy la astronomía sigue planteando preguntas todavía sin respuesta.
La astrología carece de fundamento científico y por este motivo es considerada como un fraude. La difusión de cartas astrales y horóscopos solo contribuyen al fomento del irracionalismo y del oscurantismo. Promete algo que no cumple y en la mayoría de ocasiones a cambio de una contraprestación económica en la que el cliente resulta engañado.
Astrónomos
Actualmente el término «astrónomo» ha evolucionado a «astrofísico» ya que el estudio del cosmos se hace de acuerdo al estudio y aplicación de los métodos y leyes de la física. Entre las personas que practican la afición de observar los astros con telescopio o los que profesionalmente manejan instrumental astronómico con asiduidad si que se sigue utilizando el término «astrónomo» (en ocasiones entre los no profesionales se acompaña del complemento «amateur» o «aficionado» aunque este último no es aceptado por toda la comunidad por tener una posible interpretación peyorativa).
En cualquier caso, la observación y el estudio de los objetos celestes no puede estar nunca asociado a prácticas adivinatorias si quiere ser tomado con seriedad.
Tenga en cuenta que para llegar a ser astrofísico es necesario cursar una carrera universitaria (grado de Física) y realizar estudios de posgrado.
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